Club de Tenis en Oliva (Valencia)

Serias irregularidades podrían llevar al Club de Tenis de Oliva, Valencia, al cierre del bar restaurante que se encuentra dentro de sus instalaciones. Como puedes ver en las imágenes, las condiciones en las que se encuentra la cocina de este restaurante nos dejan un mal sabor de boca, además de que no cumplen con la normativa vigente. Según palabras textuales del gerente del Club, las instalaciones no tienen licencia de apertura, al igual que el club náutico y otros negocios de la zona.

El restaurante fue traspasado hace un año por un valor de 30,000€ con la falsa promesa de que el arrendador haría un buen negocio con los asistentes y socios del club. Lo que el arrendador no advirtió es que tendría que hacer descuentos a los socios del club y dejar casi gratis las consumiciones a quienes dirigen el club de tenis.

El arrendador, al sentirse estafado por la falsa  promesa del gerente, en el mismo momento en que se cumplió el contrato, decidió marcharse del local. No lo hizo sin antes llevarse todo el mobiliario, dado que no llegó a ningún entendimiento con la gerencia del club. Esta le ofrecía 15,000€ por el mobiliario que un año antes había traspasado por el doble, a sabiendas de que la cocina está muy lejos de cumplir con la normativa vigente y que el material traspasado, como la cocina, armarios, frigoríficos, mesas, etc., tiene un valor superior a ese importe.

La gerencia pensó que el arrendador, por evitar la molestia de trasladar todo este material, aceptaría su propuesta, pero esto no fue así. Esto costó a los socios y asistentes al Club de Tenis Oliva la falta del servicio de bar y restaurante durante todo el verano debido a la chulería e incompetencia del gerente.

Al parecer, siguen con la misma política de engañar a quienes arriendan el restaurante con falsas promesas. Han sido muchos los que durante años han intentado hacer negocio con este bar restaurante sin éxito, ya que están condicionados por la mafia que dirige este club, y son capaces de hacer la vida imposible a quienes no se someten a sus exigencias En una entrevista con el Gerente.  «Me sorprendió cuando se pregunto a Juan, el gerente de este club, por los anteriores arrendadores. Según él, me contó que todos habían sido unos vagos y falsos. Ninguno de los que había llevado el restaurante había sido bueno. Se aferraba a su versión, parecía que solo su punto de vista era válido.

Al parecer, han vuelto a engañar a otro arrendador que, con toda probabilidad, sufrirá el calvario de esta mafia de barrio. Después de ver las imágenes de este desastroso establecimiento, la pregunta retórica es: ¿te lo vas a comer? No solo resulta poco atractiva la idea de consumir algo en semejante antro, sino que también existe el peligro de que un día, sin previo aviso, estemos tomando una caña y saltemos por los aires. Luego, intentar pedir responsabilidades a un seguro de unas instalaciones que no cuentan con ningún tipo de licencia para llevar a cabo esta actividad, y mucho menos para la hostelería, sería un verdadero desafío si la empresa se diese con insolvencia.

En lugares así, desaconsejo encarecidamente asumir la responsabilidad de unas instalaciones sin tener en cuenta las advertencias, con los cuatro mafiosillos de turno que se saltan las leyes a la torera y explotan al incauto que caiga en sus redes.